Este mes se me plantaba como un periodo de paz y tranquilidad bailando al son que marcan los árboles lanzando sus hojas al suelo, pero nada mas distinto que eso.
He conocido a una niña que en circunstancias normales debería hacerme caer a sus pies tan solo con una de sus miradas. Me ha devuelto cierta sonrisa a esta cara gastada, pero aún hay una pieza de este puzle que no termina de encajar.
Cada día al despertarme me pregunto ¿por que me resulta tan complicado cerrar aquella vieja historia y zambullirme en esta nueva vida que se me plantea? ¿Será cierto eso que dicen por ahí sobre que cuanto mas difícil mas nos atrae? ¿que imán me atrae a ella y no me deja huir?
Se que no me quiere, incluso ahora se que quiere a otra. No se si será feliz con ella o no, os juro que le deseo lo mejor. Creo que su pasado a ella tampoco le deja respirar bien, ambas estamos enamoradas de nuestro pasado, lástima que no sea el mismo, si lo pienso tiene hasta gracia. No era nuestro momento, el de las dos. No puedo culparla de nada, pese a que a veces me llene de rabia el saber que no soy yo a quien ama, ¿pero como recriminarle eso? No puedo... es su corazón quien manda y pensandolo bien tampoco la querría a mi lado sino me amara.
Yo pasito a paso intento continuar por mi camino de baldosas amarillas y se que en algún lugar conseguiré encontrarme a mi misma. Confieso que me dejo querer, que yo no soy de piedra y mientras camino son consciente de que yo también estoy dañando otros corazones, no es venganza, solo necesito sentirme querida, y me enredo en historias que se que no llevan a ningún sitio, pero que me dan ratitos de cariño.
Si termino haciendo balance, no soy ni mejor ni peor que ella, en cuestión de amores no hay buenos ni malos. Claro que me molestó que jugase con mi corazón pero no creo que lo hiciera con maldad, ella solo quería su ratito de cariño conmigo mientras seguía su camino de baldosas amarillas.
Cantando: Procuro olvidarte, siguiendo la ruta de un pájaro herido. Procuro alejarme de aquellos lugares donde nos quisimos. Me enredo en amores, sin ganas ni fuerzas por ver si te olvido. Y llega la noche y de nuevo comprendo que te necesito.
(Procuro olvidarte - Falete)
He conocido a una niña que en circunstancias normales debería hacerme caer a sus pies tan solo con una de sus miradas. Me ha devuelto cierta sonrisa a esta cara gastada, pero aún hay una pieza de este puzle que no termina de encajar.
Cada día al despertarme me pregunto ¿por que me resulta tan complicado cerrar aquella vieja historia y zambullirme en esta nueva vida que se me plantea? ¿Será cierto eso que dicen por ahí sobre que cuanto mas difícil mas nos atrae? ¿que imán me atrae a ella y no me deja huir?
Se que no me quiere, incluso ahora se que quiere a otra. No se si será feliz con ella o no, os juro que le deseo lo mejor. Creo que su pasado a ella tampoco le deja respirar bien, ambas estamos enamoradas de nuestro pasado, lástima que no sea el mismo, si lo pienso tiene hasta gracia. No era nuestro momento, el de las dos. No puedo culparla de nada, pese a que a veces me llene de rabia el saber que no soy yo a quien ama, ¿pero como recriminarle eso? No puedo... es su corazón quien manda y pensandolo bien tampoco la querría a mi lado sino me amara.
Yo pasito a paso intento continuar por mi camino de baldosas amarillas y se que en algún lugar conseguiré encontrarme a mi misma. Confieso que me dejo querer, que yo no soy de piedra y mientras camino son consciente de que yo también estoy dañando otros corazones, no es venganza, solo necesito sentirme querida, y me enredo en historias que se que no llevan a ningún sitio, pero que me dan ratitos de cariño.
Si termino haciendo balance, no soy ni mejor ni peor que ella, en cuestión de amores no hay buenos ni malos. Claro que me molestó que jugase con mi corazón pero no creo que lo hiciera con maldad, ella solo quería su ratito de cariño conmigo mientras seguía su camino de baldosas amarillas.
Cantando: Procuro olvidarte, siguiendo la ruta de un pájaro herido. Procuro alejarme de aquellos lugares donde nos quisimos. Me enredo en amores, sin ganas ni fuerzas por ver si te olvido. Y llega la noche y de nuevo comprendo que te necesito.
(Procuro olvidarte - Falete)